Mensaje del 25 de septiembre de 1997
Queridos hijos, hoy os invito a que comprendais que sin amor no podeis entender que Dios debe estar en el primer lugar en vuestras vidas. Por eso hijitos, os invito a todos a amar , no con amor humano sino con el amor de Dios. Así, vuestras vidas serán hermosas y no interesadas. comprenderéis que Dios se da por amor del modo mas simple..
65. El amor de Julia
El pueblecito de Saint- André, en la periferia de Marsella, sobresale majestuosamente entre las colinas perfumadas y salvajes que constituyen el encanto de la Provenza. La familia Porta vive allí al ritmo de la naturaleza.
Con sus catorce años , a la pequeña Julia le gusta la rayuela en la plaza del pueblo, y a nadie se le escapa su gran belleza. Sus largos cabellos negros bailan y ondulan al cómpas de los saltitos rápidos y vivos sobre los cuadrados cuidadosamente dibujados con tiza. Gastón de 17 años , no puede de dejar de mirarla detenidamente. ¡ Qué hermosa es ¡ ¡ Cuánta gracia tiene ¡ ¡como quisiera ser su amigo ¡ Decide acercarse , le ofrece unos caramelos y murmura las primeras secuencias de lo que se convertirá en una maravillosa historia de amor. No tardan en prometerse el uno al otro.
En está Francia de antes de la Primera Guerra mundial, los adolescentes tienen tiempo para conquistar dulcemente sus corazones, al ritmo lento y profundo de la naturaleza humana. En aquella época , la angustia de ser " tomado y descartado" , aun antes de descubrir la identidad del otro, no tiene cabida. Julia a cautivado el corazón de Gaston . Pero con sus catorce años y dicisiete años son muy jovenes y deben de adquirir mas madurez y someter ese sentimiento a la prueba del tiempo. A petición de sus padres , Julia espera la mayoria de edad-- en aquel entonces a los veintiún años- antes de pronunciar el "sí" ante el juez y ante Dios, "si" que hará de ella esposa de Gastón.
Excelente Carpintero, muy hábil con sus manos, Gastón sabe hacer de todo y dirige la barca familiar con felicidad. Por las tardes, le gusta tocar el acordeón y alegrar a la familia y a los amigos reunidos delante de la casa. Dos niños son traidos al mundo en esta simple y sana atmosfera de un lugar donde reina el amor. Los jovenes esposos beben la vida así como les viene. Quien podria entonces adivinar el nubarron que se perfila inexorablemente en un rincon de su azul cielo ?
Estalla la guerra de 1914 . el ejército recluta a los jovenes de los alrededores que se desplazan a miles hacia el norte por el valle del Ródano, para enfrentarse al enemigo en las fronteras franco- alemanas. Gastón figura entre los convocados. Pero no responde ¡? Cómo dejar a una mujer y dos niños, un hogar tejido con lazos tan tiernos?
la guerra no perdona. Un día vienen a buscarlo por la fuerza y le colocan esposas en las muñecas. ¡ lo consideran desertor¡ los niños gritan. Julia en llanto, queriendo oponerse, recibe un puntapie tan violento que cae aplastada contra la pared. Luego, sin una palabra, como una rafaga de viento, parten todos. En un abrir y cerrar de ojos la felicidad de Julia se ha quebrado y nunca será igual.
En el corazón de este alegre hogar, se instala un vacío, una ausencia lacerante.
Julia se pone de pie ante los dos niñitos aterrados. La cabeza le da vueltas, pero es sobre todo su corazón el que siente vértigos. ? Será una pesadilla ? se pregunta. " ¡? Voy a despertarme con un beso de Gastón para retomar nuestra vida juntos? " el Reloj del salón, como si nada hubiera pasado, toca las horas que se han convertido en agonía.
Gastón no vuelve. No existen subsidios familiares y Julia va a tener que trabajar. Consigue un puesto en casa de una familia burguesa que le confía trabajos más humillantes. Esta familia la maltrata, la desprecia, intenta abusar de ella y tiene que haces de tripas corazón para perseverar, ¡No tiene alternativa ¡
Gaston no llama, no escribe, sólo se sabe que está allá en las trincheras, en Lorena. Julia se convierte en centinela; con todas las antenas conectadas, quiere captar la más mínima información proveniente del frente. ¡¿ las trincheras? Desgraciadamente el panorama es más que negro: ¡los hombres caen a cientos¡ la situación está bloqueada , el abastecimiento es deficiente y muchos de nuestros soldados deben permanecer noche y día en sórdidos agujeros. ¡ En el norte de Francia el frío es muy intenso¡
Cada mala noticia se clava como un cuchillo en el corazón de Julia. Pero en el seno mismo de la tragedia, su comunión con Gastón se hace más real que nunca. No pudiendo hacer estrictamente nada para ayudarlo materialmente, imposibilitada de tan siquiera gritarle su amor para animarlo, ella va a imaginar, en su simplicidad, un medio para llegar hasta él , más allá de las palabras, superando los límites terrestres. ¡ Cuán ingenioso es el amor ¡
Una noche de invierno, cuando el mistral castiga los vidrios y hace vibrar la humilde puerta de madera, Julia se acuesta sobre la baldosas heladas de su habitación. ¡ Sí, de ahora en adelante dormirá allí, al pie de su blanda cama, hasta el regreso de Gastón ¡ ? él se congela bajo la nieve en las trincheras ?. ¡ Ella va a congelarse con él, por él¡ ? Tiembla por noches enteras? ? le falta todo ? tiene hambre? también ella se privará. Con él , por él ¡ un solo cuerpo, un solo corazón ¡
Las maniobras nocturnas de Julia no permanecen mucho tiempo desapercibidas por los dos pequeños :
"Pero mamá.." , cuestionan desestabilizados ante aquel comportamiento extraño.
Julia no es de aquellas que abundan en palabras. Con humilde pudor, tranquiliza el ánimo de sus hijos con dos o tres palabras. Los niños son místicos , y deciden espontaneamente imitar a su madre.
" Para estar como papa" se explican mutuamente antes de acostarse en el piso.
Las baldosas de piedra se han convertido en un altar , donde cada noche se celebra una nueva misa de amor, un altar donde se eleva una ofrenda que se ignora a sí misma, pues, cuando se ama. no hay sacrificio.
el 11 de noviembre de 1918 se firma el armisticio; ¡ la guerra ha terminado ¡ El pequeño resto de soldados de Provenza retorna a casa. ¡ pero es un armisticio de sangre¡ En Saint - André, llantos y gemidos resuenan en todas las casitas enlutadas. ¡ el hijo, el padre, el hermano ... no han regresado¡ reportados desaparecidos" explica el mensajero.
Una de esas tardes de noviembre, Julia llorando , abre el gran ropero de su habitación. Sus manos le tiembran de emoción. Tiene que encontrar el gran mantel de fino lino bordado y el hermoso cubrecama que su abuela ha tejido para su casamiento. Los va a planchar cuidadosamente , pues aquella velada no será como las demás . ¡Gastón ha regresado¡¡raro sobreviviente de su sección, Gastón ha vuelto a Casa, allí está, jugando afuera con los niños.¡
La larga misa de Julia ha dado sus frutos , su humilde ofrenda cotidiana ha sido escuchada desde lo Alto ¡ ¡ Dios a protegido su amor¡
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